(Ayer escribí acerca de estar dispuestos a obedecer y creerle a Dios. Hoy quise continuar con esa idea.)
Odio lavar los trastes. Siento que jamás termino. Empiezo lavando, pero no veo que baje el montón de trastes, y me desanimo.
¡Pero se siente increíble terminar ese montón de trastes!
Ese montón requiere paciencia y perseverancia.
También el problema que enfrentas hoy.
Sea tan grande que afecta todo el mundo, o tan pequeño que sólo existe en tu casa, la respuesta no cambia.
Paciencia y perseverancia.
Nosotros hacemos la diferencia no con acciones grandes, sino poco a poco.
Traste por traste.
sabemos que el sufrimiento produce perseverancia; la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza.
Romanos 5:3b-4
¡Me encanta leer (y responder a) sus comentarios!
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Creo que la paciencia y perseverancia nos pulen en cada momento de nuestra vida diaria, a veces paso la prueba, pero también hay veces que no, y he aprendido que no se trata de rendirme y decir “es que asi soy yo” sino que he perseverado para poder ser mejor en mi carácter.
Si Dios no termina con nosotros. Asi que a veces nos envía la Hermana Lija para seguir moldeandonos más a su imagen!