Eclesiastés – Capítulo Cinco

Lo Que Dios Quiere

Cuando vayas a la casa de Dios, cuida tus pasos y acércate a escuchar, en vez de ofrecer sacrificio de necios, que ni conciencia tienen de que hacen mal.

Eclesiastés 5:1

Vez tras vez vemos que Dios realmente no está tan interesado en los sacrificios. A pesar de lo que el libro de Levítico nos hace pensar, lo que realmente le interesa a Dios es nuestro corazón.

Prefiere que le regalemos nuestro oído más que otro sacrificio sin sentido.

• 1 Samuel 15:22
  «¿Qué le agrada más al Señor: que se le ofrezcan holocaustos y sacrificios, o que se obedezca lo que él dice? El obedecer vale más que el sacrificio, y el prestar atención, más que la grasa de carneros.
• Oséas 6:6
  Lo que pido de ustedes es amor y no sacrificios, conocimiento de Dios y no holocaustos.
• Salmo 51:16-17
  Tú no te deleitas en los sacrificios ni te complacen los holocaustos; de lo contrario, te los ofrecería. El sacrificio que te agrada es un espíritu quebrantado; tú, oh Dios, no desprecias al corazón quebrantado y arrepentido.

El Predicador ha visto de todo durante su vida, igual que tú y yo. Ha visto personas aparentando ser una cosa y en su corazón ser otra. Ha visto la gente (que en la cual el mundo ni se fija) entregarse a Dios apasionadamente. Y en todo eso, y con el entendimiento que Dios le ha dado, llegó a esta conclusión:

Dios quiere nuestro corazón.

Brincando al Nuevo Testamento, encontramos en las palabras de Pablo lo que debemos de hacer.

Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.

Romanos 12:1-2

Ser Antes Que Hacer

Al ver estos versos, llegamos a lo siguiente: Hemos sido llamados a ser antes que hacer.

No se trata de todo lo que podamos hacer. No me malinterpreten. El poner en práctica lo que creemos es bueno, tanto dar a los pobres como hacer acciones de caridad y ayudar a otros. Pero al final del día, Dios no está sumando todos los puntos de lo que hacemos.

Dios está interesado en lo que podemos ser. Porque hemos sido llamados a ser

• Sal y Luz (Mateo 5:13-16)
• Una Nueva Creación (Gálatas 2:20)
• Hijos (Romanos 8:15)
• Nacidos de Nuevo (Juan 3:3)

¡Y muchas cosas más!

Recuerda hoy que tienes una identidad en Dios que va mucho más allá de lo que haces.

Pregunta: ¿Estás seguro de tu identidad en Dios? Toma un momento para reflexionar en quien eres en Cristo. Descansa en que tu identidad no depende de ti.