Romanos 4:1-25
Parte 10 de la serie de Romanos. (Haz clic aquí para ver toda la serie.)
Contra toda esperanza, Abraham creyó y esperó, y de este modo llegó a ser padre de muchas naciones, tal como se le había dicho: «¡Así de numerosa será tu descendencia!» Su fe no flaqueó, aunque reconocía que su cuerpo estaba como muerto, pues ya tenía unos cien años, y que también estaba muerta la matriz de Sara.
Romanos 4:18-19
Pablo enfatiza la fe de Abraham para sus lectores judíos. Les enseña que el padre de la fe judía es también el padre de la fe de todos nosotros. El ejemplo que dejó en Génesis no solamente fue para los Israelitas, sino para todos nosotros.
Y esto de que «se le tomó en cuenta» no se escribió solo para Abraham, sino también para nosotros.
Romanos 4:23-24a
Pero este pasaje que leímos no solo es para enseñar a los judíos acerca de la fe de los no judíos, sino que hay mucho que podemos aprender nosotros también.
Esperar En El Padre
Toda buena dádiva y todo don perfecto descienden de lo alto, donde está el Padre que creó las lumbreras celestes, y que no cambia como los astros ni se mueve como las sombras.
Santiago 1:17
Abraham recibió una promesa de Dios. Hubo momentos en cuando intentó cumplir la promesa por su propia fuerza (como cuando tuvo una hija con la sierva Agar,) pero él confió en Dios. Y al fin de la espera, recibió la promesa de Dios.
Aunque “su cuerpo estaba como muerto,” él creyó que Dios iba a cumplir la promesa de tener un hijo.
Creo que un ejemplo tan grande e importante que podemos agarrar de Abraham es el ejemplo de creerle más a Dios que a las circunstancias.
Es tan fácil mirar alrededor y dudar, creyendo que tal cosa nunca va a suceder, o “siempre será así.” Es más difícil creer algo que no vemos, creer que Dios hará lo que parece imposible.
Pero a eso hemos sido llamados. A esperar en el Padre.
Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.
Hebreos 11:1
Los héroes mencionados en Hebreos 11 pudieron hacer cosas tan grandes (y a veces tan sencillas) por su fe. La fe viene antes de la acción, antes de la obediencia.
- No vamos a obedecer a alguien que no creemos.
- No queremos actuar sin creer que hay una razón (aún si no entendemos la razón.)
- No podemos hacer nada sin primero creer que habrá un resultado favorable.
Nada sucede sin la fe.
Pregunta: ¿Qué quiere Dios que hagas con tu fe el día de hoy? ¿Dónde te está llanando a esperar en el Padre y esperar contra esperanza?
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este tiempo de recogimiento en casa, en el que mi control quedo adormecido, por así decirlo, me ha dado la oportunidad de poner en practica la Fe en Dios, hace meses para ser exacta desde Marzo, estaba preocupada porque no sabia como iba a darle de comer a mi familia mientras no tuviéramos trabajo, hasta el día de hoy todos los días hay comida en mi mesa, Gracias a la provisión de Dios y esta experiencia no podría pasarla sin la Fe de que Dios cumple sus promesas, el tomo mi control y lo hizo a un lado y yo decidí pasarle el Control a El y ahora me esta yendo mucho mejor, El sabe lo que mas me conviene y lo que es mejor para mi, así que no me queda mas que doblar rodilla, tener Fe y dejar que se haga su Voluntad…..saludos y muchas gracias por todo lo que escribes y me hace reflexionar todos los días, Bendiciones.
Muchas gracias por el comentario Lorena. Yo creo que todos nosotros hemos sido probados en diversas maneras durante este tiempo, y creo que todos los que han aprendido a entregarlo a Dios saldrán de esta cuarentena mucho mejor de como entraron. ¡Que bendición poder sobrevivir la tormenta y poder decir a todos lo bueno que es Dios aún en medio de ella!