La Esquina de Aslan

“-Aslan. Dijo Lucy-, eres más grande.
-Eso se debe a que tú eres mayor, pequeña -respondió él.
-Entonces, ¿No has crecido?
-No. Pero cada año que crezcas, me verás más grande.”

–Las Crónicas de Narnia, El Príncipe Caspian

Yo amo Las Crónicas de Narnia. Leí todos los libros por primera vez cuando estaba en la primaria o la secundaria. Aunque estaba muy chico, ya pude ver un poco de la alegoría (las historias escondidas de Jesús) dentro de estas historias.

Esta escena sigue siendo una de las que más me acuerdo.

Lucy y sus hermanos habían vivido toda una aventura, y sucede que Lucy y un primo regresan a Narnia para tener –otra– aventura. Ella al ver Aslan se emociona, y no puede contenerse. Corre a él y le empieza a besar y abrazar y disfrutar. 

Después de un momento, se da cuenta de algo: ¡Se ve más grande Aslan ahora!

---

Ahora, ¿por qué estoy hablando de eso? ¿Y que es la esquina de Aslan?

Yo creo que el simple hecho de decir que somos seguidores de Jesús nos hace sentir obligados a tener todas las respuestas para nuestros amigos y familiares que no creen en Dios.

¿Entonces, Jesús fue hombre o fue Dios?
Esa es una buena pregunta, te lo explico así…

¿Pero por qué Jesús hizo/dijo tal cosa?
Ah bueno, fíjate que según este teólogo, Jesús dijo tal cosa porque…

¿Entonces son muertos a su cuerpo, pero viven por el espíritu?
¿Y creen que voy al infierno si no te hago caso?
¿Y dicen que todo de la Biblia es cierto, aunque tal persona/creencia/filosofía dice lo opuesto?
¿Y por qué creen esto?

¿Te has sentido con la necesidad de dar la respuesta perfecta ante preguntas como estas?

Quizás estoy loco y soy el único, pero puede ser abrumador tener la respuesta para todo, y tener que explicar todo.

La esquina de Aslan es donde podemos ir y decir “¡wow! Tú eres más grande de lo que imaginé. Pensé que te había entendido, pero me doy cuenta que eres aún más grande de lo que esperaba.”

Es un lugar donde no tenemos que tener todas las respuestas. Un lugar donde podemos decir, con toda sinceridad y sin vergüenza, “yo no se.”

Y es un lugar a que podemos regresar y decir “Dios, te ves más grande que la última vez que hablamos.”

Yo siempre he crecido escuchando acerca del amor del Padre. Y me suena chido… pero no era la gran cosa para mí. Yo ya tengo un papá que me ama aquí en la tierra, y pues… ¿chido? 

Pero ahora -soy- papá. Y entiendo un poquuuuiiiiito más lo que significa el amor del Padre. No pretendo amar a mis hijas cómo Dios nos ama, pero entiendo que existe niveles de amor que antes ni sabía que existían.

Amo a mis hijas de una manera que nunca imaginé, y eso me ha enseñado más acerca del amor de Dios. ¿Es posible que en diez años conoceré a Dios de una manera aún más grande? ¡Espero que sí!

En la esquina de Aslan, puedo decir “así entiendo a Dios hoy. Espero que mañana mi entendimiento sea un poco más amplio. Quizás me equivocaré en algunas cosas, quizás cosas que eran tan urgentes para mí hoy no serán la gran cosa en un año, y quizás cosas no tan importantes tomarán una importancia mucho mayor.”

Pase lo que pase, quiero conocer más a Dios, y verlo cada día más grande. 

No significa que dejaré de buscar aprender más de Dios. Al contrario, ¡quiero saber mucho más! 

Gloria de Dios es ocultar un asunto,
y gloria de los reyes el investigarlo.

Proverbios 25:2

Pero mientras más crezco en conocimiento, más grande se verá mi Dios.

Quiero terminar con unos versos que hablan de la grandeza y lo incomprensible de Dios.

Job 42:1-6 
Job respondió entonces al Señor. Le dijo:
2 «Yo sé bien que tú lo puedes todo, que no es posible frustrar ninguno de tus planes.
3 “¿Quién es este —has preguntado—,
    que sin conocimiento oscurece mi consejo?”
Reconozco que he hablado de cosas
    que no alcanzo a comprender,
de cosas demasiado maravillosas
    que me son desconocidas.
4 »Dijiste: “Ahora escúchame, yo voy a hablar;
    yo te cuestionaré, y tú me responderás”.
5 De oídas había oído hablar de ti,
    pero ahora te veo con mis propios ojos.
6 Por tanto, me retracto de lo que he dicho,
    y me arrepiento en polvo y ceniza».

Colosenses 1:15-20
Él es la imagen del Dios invisible,
    el primogénito de toda creación,
16 porque por medio de él fueron creadas todas las cosas
    en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles,
    sean tronos, poderes, principados o autoridades:
todo ha sido creado
    por medio de él y para él.
17 Él es anterior a todas las cosas,
    que por medio de él forman un todo coherente.
18 Él es la cabeza del cuerpo,
    que es la iglesia.
Él es el principio,
el primogénito de la resurrección,
    para ser en todo el primero.
19 Porque a Dios le agradó habitar en él con toda su plenitud
20     y, por medio de él, reconciliar consigo todas las cosas,
tanto las que están en la tierra como las que están en el cielo,
    haciendo la paz mediante la sangre que derramó en la cruz.

Pregunta: ¿Puedes aguantar la incomodidad de tener un Dios “demasiado grande”? ¿Puedes disfrutar a un Dios que no puedes comprender perfectamente bien?